Un estudio de ortodoncia engloba una serie de pruebas y análisis esenciales para analizar tu mordida y detectar la causa de los posibles problemas de oclusión. Por eso, tu ortodoncista debe hacerte un estudio previo y en función de la información obtenida, trabajará para definir un plan de tratamiento personalizado que mejor se ajuste a tus necesidades con el fin de a ayudarte a sacar tu mejor sonrisa.